martes, 17 de junio de 2014

Planificación

Plan urgente para cubrir el Tagarete


La existencia del canal Tagarete, hace muchos años atrás un río fuera de la ciudad y curso de aguas pluviales en época de lluvias inclusive permitiendo la vida de pequeños peces, tradicionales para los orureños, se ha convertido con el paso del tiempo en un peligroso canal altamente contaminante para la salud de miles de vecinos que asentaron sus viviendas prácticamente a pocos metros del maloliente depósito de toda suerte de deshechos.

Por enésima vez utilizamos la presente columna para dedicarle algunos conceptos al otrora río Tagarete que ahora divide la ciudad y se convierte en un largo depósito abierto de basuras, plásticos y todo lo desechable por naturaleza y por cuenta de los propios vecinos, a lo que se añade la carga de líquidos contaminantes que expulsan algunas industrias e incluso las aguas ácidas de una empresa minera, que contaminan seriamente toda la extensión del canal que es un verdadero foco de infección, vigente y admitido por las autoridades sanitarias y las del Municipio y la Gobernación.

En las instancias de responsabilidad de los organismos departamentales se menciona esporádicamente el tema del Tagarete, pero resulta que ninguna de nuestras autoridades asume la responsabilidad de disponer recursos para el embovedado del contaminante y antiestético canal en la poblada zona Este de la ciudad.

Se disponen recursos para muchos planes, algunos de maquillaje urbanístico, otros para satisfacer planteamientos necesarios, pero no urgentes en función al cuidado de la salud ciudadana. Hay que tomar en cuenta el largo curso del canal abierto por muchos kilómetros, hasta desembocar en los lagos Uru-Uru y Poopó, sin que antes las aguas del Tagarete sean objeto de un tratamiento en plantas especiales, que deberían también habilitarse para completar un verdadero proyecto de mitigación y saneamiento ambiental en la extensa zona Este donde se concentran los mayores problemas de contaminación.

Organizaciones ambientalistas han respondido al reclamo de miles de vecinos que se quejan por las condiciones de insalubridad en la que viven por la proximidad con el canal Tagarete, ubicación de sus viviendas que no puede cambiarse, pero sí es posible cambiar el desastre prodigando especial cuidado a los derechos ciudadanos de vivir en condiciones saludables, con un trabajo responsable de las autoridades obligadas a eliminar los focos de infección, en este caso en toda la extensión del contaminado canal.

Se sabe de un presupuesto que serviría para la elaboración del estudio y el proyecto en sí, lo que permitiría en otra fase de emergencia disponer del presupuesto necesario para encarar el embovedado del Tagarete y por supuesto la habilitación de una moderna avenida que cambiará la deprimente situación actual para darle a esa parte de la ciudad una renovada imagen de modernidad y de beneficio en la habilitación y conexión de varias arterias de la ciudad ahora cortadas por el paso de un deleznable riachuelo.

Hay necesidad de articular una labor mancomunada de nuestras autoridades que demostrando responsabilidad de servicio a la ciudadanía dispongan de manera conjunta un presupuesto para este proyecto, proponiendo además al Gobierno central aportar una cuota parte dentro los proyectos de saneamiento básico en la perspectiva de "vivir mejor".

Responsabilidades compartidas ya se han visto y éste proyecto sería otra motivación especial para que nuestras autoridades demuestren que juntas pueden materializar objetivos de utilidad colectiva, cuidando la salud de la población, mejorando el medio ambiente y modernizando la ciudad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario